CONSEJOS PARA DISFRUTAR DE UNA NAVIDAD MÁS VERDE

Hoy os presento a Carla Zaplana. Ella también es Health Coach certificada por IIN, nutricionista y especialista en Alimentación Vegana y Raw Food. Con su filosofía Come Limpio,  su trabajo es educar  hacia una alimentación y un estilo de vida libres de toxinas ambientales, mentales y emocionales. Aunque no nos conocemos personalmente, tenemos muchas cosas en común, y para mi es un placer contar con ella en mi universo. Podéis seguirla en Facebook, donde comparte mucha información interesante y unas recetas riquísimas.

Ya se acercan las fechas de los grandes preparativos, decorar el hogar, el despacho, realizar las comprar de los regalos, pensar en todos los detalles, tenerlo todo preparado y afrontar las comilonas y sus consecuencias… Todas estas “obligaciones” pueden crearnos cierto estrés y lo que deberían ser unos días de serenidad, paz y alegría se convierten en un ajetreo constante.

En este pequeño artículo he recogido algunos puntos que a todos nos va a ir bien recordar para empezar esta nueva temporada de celebraciones con tranquilidad y disfrutando cada ocasión.

• Realiza un poco de alimentación detox antes de empezar las fiestas. El cuerpo humano tiene su propio mecanismo de depuración natural, sin embargo, en algunos casos, una complemento externo nos puede ser de buena ayuda para sentirnos mejor antes de llegar a las Navidades. Bebe zumos verdes durante 1 día o 2, incluso para sustituir algunas comidas, unos días antes de Navidad. Esta breve limpieza permitirá a tu organismo llegar más descansado y preparado para recibir las comidas de Navidad.
• Limita o Modera la ingesta de alcohol y, en caso de tomarlo, elije siempre un buen vino o cava ecológicos
• Si vas de invitado a casa de alguien lleva alguno de tus platos saludables para compartir en la mesa con los demás. Sólo presenta tu comida como regalo u ofrenda. Es tan hermosa y colorida que atraerá la mirada, y la gente sentirá curiosidad en probarla… Especialmente a la hora de los postres! Compartir es amar.
• Empieza tus comidas con una buena ensalada y que la guarnición de tus platos siempre sean vegetales.
• Pon atención en masticar muy bien cada bocado. Así evitarás engullir, facilitarás la digestión y darás tiempo a que el estómago envíe la señal al cerebro de que ya está lleno.
• Uno de los momentos más críticos de las comidas de Navidad son las largas sobremesas. Tal vez hayas moderado bien la comida y es en la sobremesa que sucumbes. Si la comida es en tu casa, evita tener los típicos dulces de Navidad en la mesa. Puedes cambiarlos por piña o papaya cortada e infusiones digestivas.
• Recuerda que las fiestas no duran 30 días, deja los extras para los 5 o 6 días principales. El resto de la semana vuelve a tu alimentación sana, variada y equilibrada con abundante verdura de hoja verde que te ayude a recuperar el equilibrio.
• Utiliza refractarios o envases de vidrio para hornear o calentar. El vidrio retiene el calor con mayor facilidad y por tanto el tiempo de cocción es menor.
• Simplifica, simplifica, simplifica. Si la Navidad es demasiada preparación para ti, entonces simplifica. ¿Qué pasaría si no llevaras a cabo todas las decoraciones de este año? ¿Y si no dieras un regalo a todos tus conocidos? A veces sólo una tarjeta de Navidad con los mejores deseos y una nota especial y personal desde el corazón es lo que más necesitamos. Si te apetece puedes elaborar tus propios regalos como unos bombones o crackers crudiveganas y envolverlas en una cajita.
• Si quieres ser más ecológico y no quieres comprar un árbol de Navidad, elabora uno con papel reciclado y ramas secas o decora un árbol de tu jardín.
• Piensa en lo que es más importante. Dar tu amor y estar relajado es mejor que llegar estresado y frustrado. No te sientas culpable por pensar en tus necesidades, lo más importante es cuidarte para poder dar lo mejor de ti.
• Sal fuera y toma contacto con la naturaleza. Incluso cuando el clima es frío y poco atractivo. Supera las excusas y sal a la calle todos los días a caminar durante 30 minutos. Tiene el poder de dinamizar y elevar tu espíritu y energía.
• Respeta tus horas de sueño, te ayudará a mantenerte equilibrado, tranquilo y energético.
• Respira profundamente y a menudo, y toma tiempo para apreciar y dar gracias por lo que tienes. La respiración y la apreciación son grandes reductores de estrés.

Cada uno de estos recordatorios deberían formar parte de nuestra vida diaria y es que el cuidado de uno mismo, el respeto hacia el entorno y hacia los demás son los mejores regalos que podemos ofrecerle a nuestro ser. Hasta aquí, solo me queda que desearte unas ¡Felices y Saludables Fiestas!