EL AGUA QUE BEBES : VENENO O REMEDIO

El agua es un elemento esencial para la vida. Después del aire, es nuestro alimento más importante. Podemos estar hasta 40 días sin comer, pero sin beber, no sobreviviríamos más de 7. Somos un 70% agua y nuestra sangre, contiene hasta un 82%.

Actualmente, estamos en un estado casi de alarma, ya que la cantidad de tóxicos que ingerimos del aire, (ver artículo) del agua, de los alimentos, productos del hogar, higiene personal… crean un coctel que altera el correcto funcionamiento de nuestros sistemas.

Por es clave realizar protocolos depurativos, comer ecológico, usar productos sin tóxicos, beber agua filtrada y tener sistemas que depuren el aire en nuestro hogar. Como consumidores conscientes, podemos cambiar las cosas, si nos empoderamos con nuestra salud y dejamos de financiar empresas  y sistemas que nos intoxican.

Funciones del agua

El agua ayuda en casi todas las funciones del cuerpo humano: transporta nutrientes y oxígeno a las células, ayuda a convertir los alimentos en energía, limpia nuestros riñones de sustancias tóxicas, hidrata la piel, mucosas, ojos…

El agua ayuda a nuestras encimas pueden funcionar correctamente, permite los procesos metabólicos y la eliminación de las toxinas a través de los órganos de eliminación. Sin el agua nuestras células no podrían excretar los metabolitos que producen con la consecuente acumulación en los órganos de eliminación. Todo ello obstruye nuestro cuerpo aumentando las toxinas en sangre y acidificando nuestro organismo por el ensuciamiento intra y extracelular.

Además, parece ser que los enfermos padecen de déficit importante de agua. El Dr. Faridun Batmanghelidj, ha demostrado que muchos síntomas de enfermedad se reducen y desaparecen con solo beber suficiente agua. Estos datos los ha podido contrastar con 3000 de sus pacientes.

Tal vez pueda sorprender los beneficios del agua pero no olvidemos parece estar que este mágico elemento regula todas las funciones dentro de nuestro organismo. El agua se mueve por el sistema linfático y por la sangre, está presente en la orina, en la saliva, en el líquido de la medula ósea y dentro de la célula. Incluso en el interior de nuestros huesos el agua circula por cada una de las fibras nerviosas pasando a través de microscópicos canales.

Ahora empezamos a entender que muchas de las enfermedades que amenazan al ser humano hoy en día pueden ser consecuencia de un déficit de agua y un exceso de agua en mal estado.

La importancia del agua

Cada día nuestro organismo en la actividad diaria, pierde entre uno y tres litros en agua solo a través del sudor, orina, vapor de agua de nuestra exhalación., por lo que necesitamos reponer con lo que bebemos y comemos. Al igual que una planta se marchita y se seca con la falta de agua, el hombre también pierde su fuerza y se enferma debido a la escasez de agua.

La principal fuente de hidratación debería ser los alimentos que comemos. Las frutas, nuestro alimento ideal, y los vegetales crudos, son altos en agua, y por supuesto en nutrientes. Si estos vegetales son ecológicos y sin pesticidas, estamos tomando el agua de mayor calidad que hay. Sin embargo, por mucha fruta que tomemos, necesitamos recurrir a otras fuentes, tanto para hidratarnos, como para cocinar, preparar infusiones, batidos…

El agua para que sea saludable y óptima, y por lo tanto pueda cumplir sus funciones correctamente, debe estar libre de sustancias químicas y tóxicos, (es decir correctamente filtrada) y por otro lado conservar su vitalidad o estructura.

Vitalización de agua

El agua tiene la capacidad de transportar la información. Pero solo cuando hay una estructura molecular adecuada, en este caso en forma geométrica hexagonal, que es la forma ideal para que el agua pueda penetrar en el interior de la célula, limpiarla de toxinas y transportar adecuadamente los nutrientes. Muchas de nuestras células se mueren porque hay tóxicos intracelulares que hacen que las células no puedan realizar sus funciones adecuadamente y envejezcan rápidamente.

Se han realizado investigaciones en las que se ha comprobado que el agua sucia se limpia a sí misma en el curso del río. El constante movimiento en remolino extrae el aire del agua y le vuelve a introducir aire fresco, esto provoca la muerte de los microorganismos. Diferentes técnicas de remolino que existen en la naturaleza con esta función.

Si pensamos en el agua de manantial y el agua de un estanque podemos ver la diferencia increíble entre una y otra. Mientras la primera parece trasnparente , limpia y cargada de energía la segundo se vuelve opaca, sucia y los microorganismo comienzan a reproducirse.

Por ello es tan importante vitalizar el agua antes de tomarla. Existen sistemas de vitalización que imitan el movimiento de remolino que vemos en la naturaleza. Este movimiento revitaiza el agua, la carga de energía y favorece su restructuración.

El agua del grifo lamentablemente viene totalmente desestructurada a nuestras casas debido a las altas presiones que sufra a su paso durante kilómetros de tuberías demasiado rectas. El agua embotellada por su parte, se encuentra estancada en las botellas durante tanto tiempo que pierde toda la vitalidad.

Para los que queráis investigar más sobre este tema, sin duda tenéis que leer a Masaru Emoto, su libro los mensajes del agua, y  las investigaciones científicas, realizadas por el Dr. Mu Shik Jhon, que avalan la su teoría en el libro «puzzle del agua y la clave hexagonal

¿Sabes lo que bebes?

El agua debería ser por tanto prioridad 1 en nuestra vida, y deberíamos tener derecho a tener acceso ilimitado al agua, según nos la da la naturaleza. Sin embargo, la contaminación, el uso desmesurado de todo tipo de sustancias químicas, medicamentos, plásticos, deshechos, contaminan nuestra fuente de vida.

El agua que bebemos, tanto del grifo como embotellada es totalmente venenosa y perjudicial para nuestra salud. Como siempre, la legislación y los gobiernos, toman medidas cuando se producen los daños, y por otro no les interesa que esta información salga a la luz. Teorías conspirativas aparte, nosotros tenemos la responsabilidad de tomar medidas y hacer que esta información se difunda.

Agua del grifo

El agua del grifo viene de pantanos y acuíferos que luego es filtrada y tratada con cloro y flúor para matar bacterias e intentar eliminar los residuos y elementos tóxicos que contiene. Lamentablemente es imposible ya que los sistemas de depuración son anticuados y fueron implementados hace décadas y no están preparadas técnicamente para filtrar los cientos contaminantes que tiene el agua. En ese momento el conocimiento que existía sobre los efectos de los contaminantes en nuestro organismo era muy limitado y la cantidad de agentes tóxicos a los que estábamos expuestos eran menores.

De hecho, los valores límite políticamente establecidos en cuanto a los contaminantes que el agua puede contener fueron establecidos de acuerdo a investigaciones y parámetros que hoy en día están desfasados y no son suficientes por lo que beber agua del grifo no es seguro aunque las instituciones la califiquen de “potable”. Potable no es saludable. Incluso dentro de los límites, faltan estudios sobre el efecto acumulativo de las sustancias o compuestos químicos que entran en el cuerpo.

Los riesgos para la salud de la contaminación del agua todavía no han sido suficientemente investigados y solo se conocen algunos efectos, como los de: nitratos, nitritos, pesticidas, seudo-hormonas, residuos farmacológicos, antibióticos, plomo, cobre, fosfatos, cloro, etc. (uranio, metales, productos químicos, sedimentos biológicos, bacterias, virus, medicamentos, hormonas, antibióticos, sustancias fecales , etc). Algunos se han reconocido como cancerígenos, pueden provocar daños en el material genético, producir infertilidad en hombres, trastornos en el sistema hormonal y nervioso o en el cerebro, causar daños y desequilibrios en el crecimiento y desarrollo de huesos y el esqueleto y dificultades de concentración y aprendizaje.

Bacterias cada vez más resistentes

Algunos científicos ya han advertido de bacterias patógenas resistentes al cloro y al tratamiento químico del agua debido al incremento de antibióticos en la medicina y cría de animales que ha generado un fuerte aumento de bacterias y microorganismos cada vez más resistentes y peligrosos.

PH del agua 

Debido al tratamiento químico y depurador aplicado en el agua y a la lluvia ácida que va a parar a los pantanos y es filtrada en los acuíferos y a los ríos, el PH del agua se acidifica y hace que su efecto corrosiva aumente y las tuberías liberen todo tipo de sustancias tóxicas en el agua que forman parte del material del que están hechas.

Y esto no es lo peor ya que muchas tuberías están hechas de plomo y PVC que liberan cloruro de vinilo al agua. Esta situación se agrava con el tiempo conforme el agua se vuelve más ácida y más material tóxico se libera en el agua.

El gobierno y los ayuntamientos no saben cuantas de estas tuberías quedan y solo son cambiadas cuando alguna se rompe ya que eliminar las tuberías supondría una inversión de tal envergadura que los ayuntamientos no pueden asumir. Todavía quedan miles de kilómetros de tuberías con materiales cuyos riesgos son un verdadero peligro para nuestro cuerpo.

Agua embotellada

Disruptores endocrinos

Las botellas de plástico liberan disruptores endocrinos y sustancias cancerígenas en el agua cuando las temperaturas a las que están expuestas supera los 18 grados, una temperatura que se supera en los almacenes y en los hogares. Los disruptores endocrinos, BPAs y otros imitadores y bloqueadores de nuestras hormonas afectan negativamente al desarrollo del sistema nervioso central y alteran el funcionamiento de nuestro sistema nervioso. El resultado pueden ser todo un espectro de enfermedades como el cáncer, la diabetes, obesidad y trastornos de fertilidad. Esto es todavía más peligrosos para sectores de la población más sensibles a este tipo de sustancias como son los niños y las mujeres embaradas. Cada vez son más los niños que nacen con malformaciones, problemas en el desarrollo corporal y deficiencias en la inteligencia y en el funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso.

También ya se sabe que el tereftalato de polietileno (PET) libera el metal pesado antimonio.

Agua tratada de baja calidad

Además, y por si esto no fuera poco, los fabricantes de agua embotellada usan ácido carbónico que prolonga la caducidad del agua y gracias a ello tampoco sea necesario controlar el tiempo que estas empresas mantienen las botellas en sus almacenes y en los de las grandes superficies y supermercados donde son vendidas haciendo que las posibilidades de que el agua esté contaminada aumenta enormemente.

Por otra parte, son ya demasiados los casos en los que se han demostrado que algunos fabricantes mezclan agua del grifo o aguas residuales con el agua de sus manantiales.

Como el agua de los manantiales cada vez contiene más residuos y su acidez aumenta como consecuencia de la filtración de contaminantes ambientales procedentes de los campos de cultivo, las aguas residuales y las ciudades, parece que algunos fabricantes utilizan sistemas de osmosis inversa que eliminan no solo residuos sino también los minerales que el agua contiene para después añadirlos en polvo.

Contaminación medioambiental y sufrimiento animal

Según los últimos datos parece que más de 6,5 millones de toneladas de plástico llegan año tras año hasta los océanos y ya existen vertederos de plástico en forma de islas en el Pacífico con superficies casi tan grandes como toda Europa.

Al año se embotellan unos doscientos mil millones (200.000.000.000) de litros de agua en botellas PET a las que tenemos que sumar las botellas de otros productos que también usan este tipo de plástico (aseo, hogar, alimentos envasados, bebidas, etc).

El plástico se descompone muy lentamente y al ser triturado por el reciclaje y el ataque de los animales acuáticos acaba en el plancton, luego en los peces y aves marinas y por último regresa a nuestro cuerpo al alimentarnos de estos animales.

Es realmente dramático ver retorcerse de dolor hasta la muerte a tortugas y otros animales marinos cuando tragan bolsas de plástico al confundirlas con medusas. Muchos de estos animales mueren de hambre o envenenadas con sus estómagos llenos de plástico.

Ya han sido documentadas más de 6000 tipos distintos de partículas de plástico en nuestros mares.

No somos capaces de determinar el alcance y efecto negativo que esto supone en la salud de todas las formas de vida que habitamos este maravilloso planeta.

Contaminantes más nocivos

Aunque no debemos recrearnos en los aspectos negativos, en la enfermedad, ni es bueno crear alarma, ni que cunda el pánico, creo que es importante que tengamos información para poder decidir responsablemente y que la situación cambie respecto al tema del agua. Aquí simplemente os dejo una muestra de lo que provocan algunos contaminantes, la lista es extensísima y os invito a que sigáis investigando.

Además, como decía, tampoco se han estudiado los efectos acumulativos de todos los tóxicos a los que estamos expuestos, pero actualmente podemos ver el aumento de enfermedades mentales, cánceres, trastornos de personalidad, ansiedad, enfermedades «cronicas», problemas en la piel, degenerativos, … que antes no existían con tanta frecuencia.

Cloro

El cloro no permanece estable en el agua sino que se combina con muchos otros componentes del agua para generar nuevos compuestos químicos. Estos nuevos productos pueden producir riesgos mucho mayores para la salud que los que provoca el cloro. Hasta el momento se han encontrado más de 700 sustancias diferentes y parte ellas con efecto neurotóxico y narcótico sobre el cerebro entre otros (en el sistema nervioso, disminución de la capacidad de concentración, deterioro de la memoria, trastornos de la personalidad). Así que… mucho cuidado con el vapor de cloro producido en el baño durante la ducha!!!

Fluor

El flúor se acumula en el organismo y al ser inhalado en grandes cantidades provoca grave irritación de las vías respiratorias, dolor de garganta, tos y dificultad para respirar. El flúor tiene efecto corrosivo por lo que en contacto con nuestra piel genera irritación, enrojecimiento y sequedad. El contacto con los ojos produce irritaciones y graves lesiones oculares, más si abrimos los ojos en la piscina en verano y si llevamos lentillas.

El flúor afecta negativamente a la tiroides y bloquea el metabolismo de las grasas y proteínas lo que conduce a que muchas personas vean ralentizado su metabolismo. Las grasas y proteínas se almacenan en el tejido y las personas engordan, aumenta su fatiga y se vuelven pierden el humor y la energía.

El flúor calcifica nuestra glándula pineal y ello genera que las persona vean reducida su voluntad y sean más proclives a ser dominados y no defenderse. No es casualidad que el 25 % de todos los tranquilizantes relevantes y el 60 % de los psicofármacos contienen flúor y el efecto en los pacientes que los toman sea una pérdida notables de sus capacidades mentales, el aumento de peso y la falta de motivación.

También han sido documentados un descenso del recuento de espermatozoides en el hombre por el fluoruro de sodio.

Aluminio

Parece ser que la intoxicación por este metal es una de las principales causas de la pérdida de habilidades mentales, desde el empeoramiento de la memoria y dificultades para concentrarnos hasta toda un amplio espectro de diferentes formas de demencia.

Y lo peor de todo es que las empresas de abastecimiento de agua tienen el permiso para utilizar el sulfato de aluminio, una sustancia que muy barata que sirve para purificar el agua.

Plomo

El plomo es uno de los elementos más tóxicos y con peores consecuencias en nuestro organismo. Una contaminación crónica con plomo puede producir desde trastornos del comportamiento hasta una reducción en la inteligencia y de nuestro sistema hormonal. Es bioacumulable en los huesos y tejidos blandos del cuerpo por lo que los niveles de plomo en el cuerpo van aumentando en el organismo con el paso del tiempo.

El pescado, los coches diésel, el agua, productos de aseo, belleza y del hogar y muchos alimentos envasados contienen cantidades plomo alarmantes.

Arsénico

Las consecuencias de este elemento en el cuerpo abarcan todo tipo de efectos adversos, desde calambres, náuseas, vómitos y hemorragias internas antes de que la contaminación cause daños peores a largo plazo. El arsénico es un carcinógeno y su lenta intoxicación debido a la cantidad presente en el agua que ingerimos hace los efectos dañinos sobre nuestra salud no sean detectados hasta diez años después y por ello la relación entre este elemento y algunas enfermedades sea difícil de confirmar con rotundidad.

Hagámoslo por ellos

Los niños, bebés y fetos son los más sensibles ante los contaminantes que el agua contiene, ya sea del grifo o embotellada. Su sistema inmunológico todavía no está formado o todavía es muy sensible ante el cóctel de tóxicos a los que estamos expuestos por lo que debería ser una obligación por nuestra parte, cuidar de aquellos que serán la nueva generación y tendrán que cuidarnos en un futuro.

Todavía no han sido suficientemente investigados los efectos del agua en el desarrollo del feto en mujeres embarazadas pero cada vez son más las pruebas que confirman que enfermedades mentales, problemas en el desarrollo normal, retraso en la inteligencia y anomalías en el funcionamiento hormonal y nervioso, pueden tener como causa los contaminantes que las medres ingieren a través del agua y en los alimentos.

Todo ello hace que cada vez sea más necesario controlar y reducir lo que ingerimos puesto que la cantidad de sustancias peligrosas para nuestro organismo aumenta cada día.

¿Cual es la solución?

Yo hace tiempo que ya opté por tener un sistema de tratamiento de agua. Hoy por hoy es la única solución fiable. Es imprescindible que tengamos uno en casa que filtre todos los contaminantes del agua. Sí, es un poco injusto que tengamos que invertir en algo que deberían hacer nuestros gobiernos, pero si tuviésemos que ir al ritmo que nos marca el sistema, o guiarnos por sus directrices educativas, ambientales, alimentarias etc, en fin… que me voy de tema.

Hay varios sistemas en el mercado que sirven para filtrar los tóxicos:

• Filtro de carbón: sin duda el mejor, de carbón vegetal (cascara de coco). La clave es la porosidad del carbón, que es lo que marca la diferencia a la hora de dejar pasar las partículas nocivas. Cuanto más pequeño mejor. El más pequeño que hay es de 0,2 micras. De ahí los hay hasta 1. Con 0,2 micras elimina prácticamente todos los contaminantes, sin eliminar los minerales buenos.
• Osmosis: elimina todos los contaminantes pero también los minerales, por lo tanto suele acidificar el ph, y además deja el agua sin vitalizar. Es un mecanismo que gasta mucha agua y energía (solo se aprovecha un litro de cada  9). No es nada saludable beber agua osmotizada al estar desmineralizada y muerta.
• Destilación: lo mismo que la osmosis, con la desventaja de que se tarda muchísimo en hacer el proceso de destilación (unas 4 horas por 4 litros).

Por otro lado es importante que el sistema además de filtrar, vitalice el agua y tenga una lámpara ultravioleta para eliminar microorganismos.

Hasta ahora, habíamos tomado conciencia de los alimentos que ingerimos, pero no debemos olvidar el alimento más importante: el agua de la vida. Es el que nos puede curar o hacer enfermar, así que amigos, compartid esta información con vuestro entorno y no dejemos nuestra salud en manos externas.

Tanto yo como el equipo de profesionales de la salud de The People Up, formados por médicos (de familia, nefrólogos, geriatras, radiólogos, cardiólogos…) , nutricionistas ortomoleculares, clínicos, terapeutas holísticos, naturopatas, chefs, centros médicos… hemos investigado mucho y creado el Instituto del Agua. Nuestra misión como movimiento es generar una nueva geometría de salud, económica y empresarial. Para ello nos apoyamos en varios pilares: la investigación, educación, innovación, las causas y el emprendimiento.

Estudiamos la relación entre el agua y la salud, la toxicidad y la enfermedad y aplicamos protocolos a pacientes basado en la Nueva Medicina. También hemos validado, comparado y estudiado diferentes opciones en cuanto a los mejores sistemas de tratamientos que hay en el mercado. Además, como plataforma de consumo consciente hacemos acuerdos con fabricantes éticos y sostenibles para poder comprar colectivamente y beneficiarnos de descuentos.  Puedes visitar la tienda donde hablo más sobre el sistema, pinchando aquí.

Si necesitas más información, no dudes en escribirme: cris@eluniversodecris.com, o solicitar información vía whasapp, pinchando aquí.